Mi cabeza hizo un click; aunque admito que no lo asumí por completo todavía. Siempre necesito ese "empujoncito" ( chiquito, porque si es grande, quizás me pueda caer) .

Hoy, me sirvió hablar muchísimo con Meli, la petisa huevona; Hacía mucho que no hablábamos, porque en sí hacía mucho que no nos juntábamos. Y hablamos de muchísimas cosas; una, de arriesgarse por lo que uno realmente quiere, corriendo el riesgo de que a "otros" no les guste; o nos priven de esa felicidad.

Una de las cosas que más me quedaron grabadas fué:

Meli: - Quizás deberías ponerle un límite a la situación; porque, cuando uno siente cosas por alguien, eso cada vez puede llegar a más .. y corrés el riesgo de sufrir.

Lau: - Si, es que, sé que siento más de lo que esperaba. Y, tengo miedo de que si todo termina, voy a sufrir más de la cuenta. Siempre se sufre, pero bueno .. va a ser peor.

Meli: - Y sí gorda, es normal. Por eso te digo, tenés que ponerte un límite, porque sino todo se te va a ir de las manos. Hay muchas cosas que juegan en contra; y eso lo tenés que tener en cuenta. El hecho de que él no te tenga como quiere, y vos no tenerlo igual, cuenta demasiado. Y en algún punto eso va a ser difícil.

Lau: - Sé que hay cosas que juegan en contra; nada es imposible. ( Sigo repitiendo lo mismo). Así como para él es difícil, para mi también lo es. Para los dos; y por un lado pienso en dejarlo ir, para que esté con esa persona que le pueda dar lo que yo no, pero por el otro me muero de ganas de tenerlo conmigo, y no lo quiero dejar ir.

Meli: - Límites, sólo eso. Es díficil, pero es lo mejor que podrías hacer. Tratá por lo menos. Lo querés, lo necesitás, lo extrañás, es obvio. Pero, por más que se quieran, la distancia y el hecho de no estar juntos, va a ser una complicación más.

Lau: - ( Cara de tristeza ). Siento que no puedo!.

En fin, hablamos de muchísimas cosas más. Pero la palabra "Límite" fué la palabra que más me atrapó, que me quedo rebotando una y mil veces en mi cabeza.

Es verdad, amamos sin límites. Y a veces, eso se transforma en un error, porque nunca sabemos qué pasa por la cabeza del otro ( como en este momento, el tiempo que necesita él para ordenar su vida ). Queremos que esa persona se quede en nuestra vida, sin límites. Queremos ser felices con esa persona sin límites, a ser feliz sin límites. Pero a veces, sobrepasar ese límite puede ser "no tan bueno"; y te podés llevar una desilusión.

No puedo ponerme un límite ahora, no con todo lo que siento por él. Pero, va a ser cuestión de tiempo, porque, quizás la ilusión que tengo de que todo esté bien no sea lo que en verdad debería ser; sea solo un reflejo de lo que este corazón quiere y nada más. Y, es como todo, cuando llega lo que no esperamos, duele ..